Vivimos en una sociedad cada vez más centrada en el manejo de la información y de la comunicación. Las TIC se han convertido en herramientas verdaderamente útiles para transmitir y recibir información en cualquier parte del mundo. Hoy en día éstas influyen en la educación, en el trabajo, la comunicación y en las redes de información a nivel mundial.
La discapacidad es una condición humana con un impedimento físico sensorial o mental para una dificultad que imposibilita al sujeto un desempeño normal de las actividades. Lo que genera una condición particular para la realización de actividades e interacción con el mundo.
Las Tic (Tecnologías de Información y Comunicación) son el conjunto de instrumentos informáticos orientados a funcionar como soportes para el tratamiento, acceso y modificación de contenidos digitales por parte de los usuarios. Son medios a través de los cuales se logran fines de aprendizaje, desarrollo de capacidades e interacción social. Existen diferentes tipos de herramientas según la discapacidad:
– Para discapacidades visuales: Impresoras Braille, calculadoras parlantes, detectores de obstáculos para guiar personas, lupas ampliadoras de pantallas, magnificador de imagen, Software con reconocimiento de caracteres, etc.
– Para discapacidades auditivas: Programas para la conversión de voz en texto, herramientas de correo electrónico y chat, Software para el aprendizaje del lenguaje de señas, Audífonos programables, Señalización visual, luz en lugar de sonido, etc.
– Para discapacidades motoras: Teclados alternativos adaptados, Programas reconocedores de voz, instrumentos de control remoto, etc.
Dentro del universo de la tecnología, de la información y de la comunicación existen múltiples herramientas para personas discapacitadas, dirigidas a facilitar su uso dependiendo de sus limitaciones. Lo más importante es que los discapacitados conozcan las ventajas que las Tic puedan aportarle y que sobretodo tengan acceso a las mismas.
Ejemplos que dejen claro que las nuevas tecnologías ayudan mucho y lo suficiente en este tipo de casos es la de un niño autista que a sus cuatro años ya escribe casi solo, gracias a una pizarra digital que hace más divertido el aprendizaje, no como en las aulas de referencia que siempre trabajan de la misma manera, existe una motivación. Para estos niños una buena manera de aprender es jugando. En otros casos se ha comprobado como los alumnos con diferentes discapacidades también prestan más atención a los ejercicios que tienen animaciones. Se utilizan varios tipos de recursos como simulaciones visuales y auditivas, experimentando con su tacto que es lo que se puede hacer con la pizarra promoviendo una acción causa-efecto siendo muy motivante para ellos. Logrando también aprender distintas materias.
Patricia Alemán García.
Brújula Ticnee 